Los discursos parlamentarios de Práxedes Mateo-Sagasta

VOLVER AL MENÚ PRINCIPAL


100272
Legislatura: 1889-1890
Sesión: 9 de abril de 1890
Cámara: Senado
Discurso / Réplica: Réplica al Sr. Dabán.
Número y páginas del Diario de Sesiones: 134, 2300.
Tema: Carta circular del general Dabán.

El Sr. Presidente del Consejo de Ministros (Sagasta): Declaro que no me he reído del señor general Dabán ni de ningún Sr. Senador, porque no soy capaz de hacer eso. Lo que hay es, que por ciertas palabras es forzoso escucharlas de cierta manera, pero de ningún modo riendo.

Por lo demás, cree S.S. que sólo en España dejan los Presidentes del Consejo de acudir al terreno personal. No sé a qué terreno personal querrá llevarme S.S.; pero en absoluto no dejo de acudir a ninguno a que mi honor me llame. (Sensación).

Yo he tenido muy buen cuidado de no faltar personalmente a S.S. en nada, y lo tengo siempre que me dirijo al Senado, no solo por mí, sino por el Senado mismo. Ni una sola de mis palabras ha podido ofender personalmente a S.S., mientras que S.S. ha pronunciado algunas que no se encuentran tal vez en ese caso. He guardado a S.S. todas las consideraciones debidas, mientras que S.S. no me ha guardado las que son propias del puesto que ocupo, las que merezco personalmente, y las que además me debe como amigo que he sido de S.S.

No he dado motivo ninguno para que de amigo se convierta S.S. en adversario. Si he guardado a S.S. toda clase de consideraciones, y S.S. no ha querido dármelas a mí, tanto peor para S.S. En último resultado, si yo he guardado consideraciones al señor Dabán, más que por S.S. ha sido por mí mismo. (Bien, muy bien, en la mayoría).

Conste, pues, que soy incapaz de faltar a ningún Sr. Senador, siquiera sea el mayor de mis enemigos, de la manera que S.S. ha creído que le he faltado; pero ¿cómo quiere S.S. que escuche ciertas palabras? ¿Llorando?

En último término, yo he juzgado como he creído conveniente la conducta de S.S., porque S.S. es un general del ejército español, y yo, como Gobierno, tengo derecho para juzgar de la conducta de todos los generales del ejército. (Bien, muy bien).

No tengo más que decir, rogando al Senado me dispense por haberme visto obligado a molestar nuevamente su atención. [2300]



VOLVER AL MENÚ PRINCIPAL